La isla de Cabrera, un edén para desconectar del mundo
Uno de los parques nacionales más bonitos, y menos conocidos del Mediterráneo, se encuentra a diez kilómetros al sur del cabo de las salinas de Mallorca. El archipiélago de Cabrera formado por 19 islotes, está situado en un canal de difícil navegación que sirvió, entre otras, como refugio de piratas.
Cabrera es un destino idóneo para desconectar en un entorno único, donde encontraremos una variedad de lugares tanto naturales como restos arqueológicos que visitar
Historia
A pesar de su pequeño tamaño, Cabrera ha sufrido numerosos avatares con el transcurrir de los tiempos. Desde épocas remotas, muchos pueblos y civilizaciones han recalado en estas costas: fenicios, cartagineses, romanos y bizantinos buscaron aquí refugio, alimentos y agua.
Lugares de interés
En la isla podréis disfrutar de pequeñas playas prácticamente vacías y de un entorno natural que merece la pena explorar. Ademas podemos toparnos con los restos arqueológicos de los que aquí habitaron, desde tumbas fenicias hasta restos de un monasterio bizantino
Naturaleza
Posee un rico ecosistema de fauna, flora, y especies autóctonas, además de uno de los fondos marinos mejor conservados de nuestro litoral.
